domingo, junio 22, 2025

Oseas 14. Reconcíliate con Jesucristo

 

Muchas veces nos enojamos con Dios, porque nos corrige a través de su palabra, porque no nos hizo un milagro, o simplemente porque de esta forma podemos seguir en las cosas del mundo.

Los deseos de nuestra carne nos hacen enemigos de Dios. Romanos 8: 7 “Por cuanto los designios de la carne son enemistad contra Dios; porque no se sujetan a la ley de Dios, ni tampoco pueden;”

Muchas de las tradiciones del mundo están enraizadas en la carne del cristiano.

Para Dios la amistad con el mundo es simplemente enemistad con él. Santiago 4: 4 “¡Oh almas adúlteras! ¿No sabéis que la amistad del mundo es enemistad contra Dios? Cualquiera, pues, que quiera ser amigo del mundo, se constituye enemigo de Dios.

¿Cómo reconciliarnos con Cristo?

1. Tomando la decisión de volver con Dios. V 1 a “Vuelve, oh Israel, a Jehová tu Dios;” cualquier actividad que tengamos que hacer en la vida parte de una decisión, si tu estas decidido a conseguir algo, lo lograras.

2. Reconociendo nuestro pecado. V 1 b “porque por tu pecado has caído.” La única forma de llegar a la perfección es reconociendo nuestros errores para poderlos corregir.

3. Suplicando a través de la Oración, y ser humildes. V 2 a “Llevad con vosotros palabras de súplica, y volved a Jehová,” muchos cristianos ya no suplicamos, exigimos o casi que le Ordenamos a Cristo.

4. Pidiendo que Dios quite nuestra iniquidad. 2 b “y decidle: Quita toda iniquidad, y acepta el bien,” aunque pecar o no pecar es nuestra decisión. Génesis 4: 7 “Si bien hicieres, ¿no serás enaltecido? y si no hicieres bien, el pecado está a la puerta; con todo esto, a ti será su deseo, y tú te enseñorearás de él.”

5. Ofreciéndole ofrenda de labios. V 2 c “y te ofreceremos la ofrenda de nuestros labios.” A Dios le agrada que le adoremos, él es el objeto de nuestra alabanza. Deuteronomio 10: 21 “Él es el objeto de tu alabanza, y él es tu Dios, que ha hecho contigo estas cosas grandes y terribles que tus ojos han visto.” En el culto la palabra es para nosotros, la alabanza para Dios. Hebreos 13: 15 “Así que, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él, sacrificio de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su nombre.

6. Declarando que nunca volveremos a confiar en nuestras fuerzas o en la fuerza del hombre. V 3 “No nos librará el asirio; no montaremos en caballos, ni nunca más diremos a la obra de nuestras manos: Dioses nuestros; porque en ti el huérfano alcanzará misericordia.”

Dios nos ama y está siempre esperándonos, él quiere que nosotros tomemos la decisión de buscarlo, si lo hacemos él también se acercara a nosotros. Santiago 4: 8 “Acercaos a Dios, y él se acercará a vosotros. Pecadores, limpiad las manos; y vosotros los de doble ánimo, purificad vuestros corazones.

Beneficios de reconciliarnos con Cristo:

1. Dios sana nuestra rebelión, nos amará por gracia no porque lo merezcamos, y para nosotros será fácil amarlo tal como él quiere que lo hagamos. 4 “Yo sanaré su rebelión, los amaré de pura gracia; porque mi ira se apartó de ellos.”

2. Dios quitara nuestra esterilidad. En las finanzas, en el amor, en nuestra mente, en cualquier área donde estemos pasando Esterilidad. V 5 “Yo seré a Israel como rocío; él florecerá como lirio, y extenderá sus raíces como el Líbano.”

3. Daremos fruto y volveremos a vivir. V 6 “Se extenderán sus ramas, y será su gloria como la del olivo, y perfumará como el Líbano.” Jesucristo nos pasa de Mediocres o inservibles a productivos y Útiles.

4. Dios nos escuchara. Y nosotros seremos fieles. Dejaremos de ser cristianos tibios. V 8 “Efraín dirá: ¿Qué más tendré ya con los ídolos? Yo lo oiré, y miraré; yo seré a él como la haya verde; de mí será hallado tu fruto.”

Si estás cansado vuélvete a Cristo. Mateo 11: 28 “Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.”.  Cristo puede darte reposo y paz en medio de la tormenta.

Jesucristo no promete evitarnos pasar por las dificultades, pero si promete ayudarnos a superar cada una de ellas. Acércate a Cristo con el ánimo de servirlo y adorarlo y él se encarga de ti y de tuis necesidades. 

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