El ayudar a otros no solo es un acto de generosidad, el ayudar a otros también es bendición para el que recibe la ayuda y sobre todo para quien la da. Cuando realizamos una acción beneficiosa para otros, nos sentimos mejor con nosotros mismos. Dicha satisfacción proviene de la certeza de que estamos actuando del modo adecuado.
El ayudar a los demás hace
que también algún día recibamos los mismos o más favores, Jesucristo es muy
claro él dice que nosotros debemos hacer a los demás lo que nos gustaría que
nos hagan a nosotros. Mateo 7: 12 “Así
que, todas las cosas que queráis que los hombres hagan con vosotros, así
también haced vosotros con ellos; porque esto es la ley y los profetas.”
Beneficios de ayudar a los demás.
1. Felicidad en gran
cantidad. Salmo 41:1“Bienaventurado
el que piensa en el pobre;
En el día malo lo librará Jehová.” El ayudar nos
hace sentir más útiles. Saber que somos necesarios, que podemos contribuir al bienestar y
la felicidad del otro nos hace sentir importantes y valiosos. Todos
los atributos positivos que se desprenden de una actuación solidaria
contribuyen a reforzar nuestra autoestima.
2. Protección de Dios. V 2 “Jehová lo guardará, y le dará vida; Será
bienaventurado en la tierra, Y no lo entregarás a la voluntad de sus enemigos.”
Dios cuida de manera especial a quienes le sirven.
3. Paz aun cuando se esté
pasando por dificultades. V 3 “Jehová
lo sustentará sobre el lecho del dolor; Mullirás toda su cama en su enfermedad.” En
algunas ocasiones Jesucristo no nos quita el dolor, pero con él lo podemos
superar.
4. Dios tiene misericordia y
nos perdona nuestros pecados. V 4 “Yo dije: Jehová, ten misericordia de mí; Sana mi alma, porque contra
ti he pecado.” Ayudar a otros es no detenernos en sus defectos y de
esa misma forma nos mira Jesucristo.
5. Consuelo de parte de Dios
cuando todos nos abandonan. V 5-6 “Mis enemigos dicen mal de mí, preguntando: ¿Cuándo morirá, y perecerá
su nombre? 41:6 Y si vienen a verme, hablan
mentira; Su corazón recoge para sí iniquidad, Y al salir fuera la divulgan.”
No importa que todos se
pongan en nuestra contra Jehová siempre estará con nosotros. Salmo 27: 10 “Aunque mi padre y mi madre me dejaran,
Con todo, Jehová me recogerá.” Las personas a quienes
ayudamos posiblemente nos traicionen, pero Jesucristo recompensa nuestro
esfuerzo.
El tener la capacidad de
servir a los demás le da un propósito a nuestra vida. Jesucristo siempre fue
ejemplo de servicio. Mateo 20: 28 “como
el Hijo del Hombre no vino para ser servido, sino para servir, y para dar su
vida en rescate por muchos.”
La verdadera felicidad está
en servir. No dejes que tu corazón se endurezca por culpa de los demás o por tu
propia prosperidad. Si tomas la decisión de servir hazlo de manera
desinteresada. Las personas que hacen el bien pensando en una recompensa por lo
general terminan decepcionadas y sin ganas de seguir ayudando.
