viernes, abril 25, 2025

Ezequiel 16. Como serle fiel a Jesucristo


 La mayoría de los cristianos cuando tenemos nuestras primeras experiencias con Cristo nuestra vida empieza a ser transformada de manera maravillosa, esto le sucedió al pueblo de Dios. V 13 “Así fuiste adornada de oro y de plata, y tu vestido era de lino fino, seda y bordado; comiste flor de harina de trigo, miel y aceite; y fuiste hermoseada en extremo, prosperaste hasta llegar a reinar.” Los primeros días o meses de bendición, nos sentimos muy agradecidos con Dios y la iglesia que el utilizo.

Pero lastimosamente una ves que ya nos acostumbramos a vivir en bendición, empezamos a serle infiel a Jesucristo y su Iglesia. V 15 “Pero confiaste en tu hermosura, y te prostituiste a causa de tu renombre, y derramaste tus fornicaciones a cuantos pasaron; suya eras.”

Cuando sentimos que estamos bien, consideramos que la iglesia en la que estamos ya no es digna de nosotros y nos marchamos a otra o simplemente volvemos al Mundo donde éramos unos fracasados. V 16 “Y tomaste de tus vestidos, y te hiciste diversos lugares altos, y fornicaste sobre ellos; cosa semejante nunca había sucedido, ni sucederá más.”

El problema de muchos cristianos es que cuando Jesucristo los bendice y las cosas marchan muy bien se olvidan que fue Jesucristo quien los saco de la Inmundicia. V 22 “Y con todas tus abominaciones y tus fornicaciones no te has acordado de los días de tu juventud, cuando estabas desnuda y descubierta, cuando estabas envuelta en tu sangre.

Este tipo de cristiano comete una gran serie de pecados, pero siempre cree que son los demás los pecadores y por eso siempre esta juzgando a todo Mundo. V 52 “Tú también, que juzgaste a tus hermanas, lleva tu vergüenza en los pecados que tú hiciste, más abominables que los de ellas; más justas son que tú; avergüénzate, pues, tú también, y lleva tu confusión, por cuanto has justificado a tus hermanas.” El problema de juzgar a los demás es que nubla nuestros ojos y por eso no vemos lo que hacemos.

Como serle fiel a Jesucristo

1. Nunca olvidándonos de donde nos Sacó. V 6 “Y yo pasé junto a ti, y te vi sucia en tus sangres, y cuando estabas en tus sangres te dije: ¡Vive! Sí, te dije, cuando estabas en tus sangres: ¡Vive!” el recordar de donde nos saco Jesucristo hace que conservemos la humildad.

·         1.1. Recordar de donde fue que Jesucristo nos rescato y el ver en el lugar donde ahora nos tiene, hace que nunca deseemos volver atrás.  

2.Entendiendo que lo que tenemos es gracias a Dios. V 7 “Te hice multiplicar como la hierba del campo; y creciste y te hiciste grande, y llegaste a ser muy hermosa; tus pechos se habían formado, y tu pelo había crecido; pero estabas desnuda y descubierta.” David era un hombre prospero, porque él era consciente que todo lo que tenía o daba provenía de Jehová.

3.Dando gracias a Dios porque fue el quien nos dignifico. V 9-11 “Te lavé con agua, y lavé tus sangres de encima de ti, y te ungí con aceite; 10y te vestí de bordado, te calcé de tejón, te ceñí de lino y te cubrí de seda. 11Te atavié con adornos, y puse brazaletes en tus brazos y collar a tu cuello.” Muchos teníamos nuestra autoestima por los suelos, nadie creía en nosotros, hasta que Jesucristo transformo nuestra Vida.

La única forma de serle fiel a Jesucristo, a nuestra iglesia, nuestra familia o trabajo es nunca olvidando lo que ellos hicieron por nosotros, el desagradecimiento nos hace Infieles.

EMISORA PAN DE VIDA   -   BLOGS RADIO

Print Friendly and PDF