Hay personas que a pesar de que respiran y caminan están muertas.
De manera secular alguien que no tiene metas
propósitos, que no sabe para dónde va o que es lo que quiere es lo mismo que
estar muerta.
De manera espiritual para Dios una persona que está
alejada de él es como estar muerta.
Una persona alejada de Cristo está en la condición
de muerto. Efesios 2: 5 “aun estando nosotros
muertos en pecados, nos dio vida juntamente con Cristo (por gracia sois salvos),”
Solo Jesucristo puede darnos vida. Oseas 6: 2 “Nos dará vida después de dos días; en el tercer día nos
resucitará, y viviremos delante de él.”
Pero para esto necesitamos reconocer que hemos
pecado y volvernos a Dios. V 1 “Venid y volvamos a
Jehová; porque él arrebató, y nos curará; hirió, y nos vendará.” Cuando
nos arrepentimos de corazón, Dios nos pasa de muerte a vida.
Una persona viva es capaz de amar y disfrutar lo
que hace, lo mismo en lo espiritual Dios quiere que lo amemos y que cada día
busquemos aprender más de él. V 6 “Porque
misericordia quiero, y no sacrificio, y conocimiento de Dios más que
holocaustos.”
Solo a través del conocimiento logramos vida
eterna. Juan 17: 3 “Y esta
es la vida eterna: que te conozcan a ti, el único Dios verdadero, y a
Jesucristo, a quien has enviado.”
Una persona viva es capaz de luchar, de levantarse
de la adversidad, se toma de la mano de Dios y está siempre dispuesta a
intentarlo. No importa cuántas veces falle en el intento siempre se levantará
para comenzar de nuevo una y otra vez más. Efesios 5: 14 “Por lo cual dice: Despiértate, tú que duermes, Y
levántate de los muertos, Y te alumbrará Cristo.”
Una persona que está muerta y que no ama lo que
hace se vuelve negligente. Podemos decir que un muerto y un negligente es lo
mismo. Efesios 5: 15 “Mirad, pues, con diligencia
cómo andéis, no como necios sino como sabios,”
Dios nos exige que lo amemos. V 4 “¿Qué haré a ti, Efraín? ¿Qué haré a ti, oh Judá? La
piedad vuestra es como nube de la mañana, y como el rocío de la madrugada, que
se desvanece.” Aquí no nos está hablando de la piedad como misericordia
o un acto de ayuda a los demás. En esta ocasión nos está hablando del amor a
Dios. La Versión Dios habla hoy dice “Dice el Señor: «¿Qué haré contigo,
Efraín? ¿Qué haré contigo, Judá? El amor que ustedes me tienen es como la
niebla de la mañana, como el rocío de
madrugada, que temprano desaparece.”
El amar a Dios no es una opción, es un mandato.
Deuteronomio 6:5 “Y amarás a Jehová tu Dios de todo
tu corazón, y de toda tu alma, y con todas tus fuerzas.”
Solo Jesucristo pude pasarnos de un estado de
muerte a vida, tener vida es mucho mas que tan solo respirar, estar vivo es
poder disfrutar de las bendiciones de Dios en situaciones difíciles y en
situaciones agradables para Nosotros.
